sábado, 4 de octubre de 2014

Turquía ante una disyuntiva trágica, si decide atacar abiertamente a Daech, empodera a los kurdos, su enemigo regional


Siria: Turquía muy reticente a implicarse en el conflicto

En Siria, un sitio parece amenazado por los combatientes del grupo Estado Islámico y preocupa en primer lugar a Turquía. Es la tumba de un dignatario otomano, Suleiman Chah, localizada en Siria pero bajo soberanía de Ankara y, por esa razón, puesto bajo la protección de una cuarentena de soldados turcos. El presidente Recep Tayyip Erdogan amenazó abiertamente a los jihadistas de represalias en caso de ataque a este lugar.

Por primera vez, el presidente turco explicó qué podría ser, según él, el pretexto para los ataques o una intervención sin vacilar “contra la presencia del Estado Islámico”; esto pasaría, según Recep Tayyip Erdogan, “si y sólo si, los jihadistas violan el status de extraterritorialidad del mausoleo Suleiman Chah”, padre del fundador de la dinastía otomana, una minúscula porción de territorio turco sobre las orillas del Eufrates, al norte de Raqqa.

Provocación abierta

Excepto esto, haría falta al menos una provocación abierta de los islamistas para imaginar una réplica de artillería de Turquía, en el caso, por ejemplo, de la caída de proyectiles sobre territorio turco, y el Ministro de Defensa Ismet Yilmaz lo precisó bien durante su argumentación de la resolución frente al Parlamento: no tiene intención de ser aplicada inmediatamente.

Ankara no desea salir en ayuda de los kurdos

Turquía quiere poder instaurar y brindar seguridad a una zona tapón en el norte de Siria, que le permitiría administrar el flujo de refugiados, proteger su frontera y proporcionar una asistencia militar y logística a los combatientes del Ejército sirio libre, inmediatamente. Pero, incluso estas simples misiones, bien alejadas de los fines de la coalición, parecen irrealizables en el estado actual de las cosas. Y sobre todo, Ankara no desea salir en ayuda de los kurdos abriendo las hostilidades contra el grupo Estado Islámico, su antiguo aliado objetivo y quien permanece todavía en su lucha contra el poder de Bachar el-Assad.

Fuente: RFI por Jérôme Bastion publicado el 04-10-2014



Syrie: la Turquie très réticente à s'impliquer dans le conflit

En Syrie, un site semble menacé par les combattants du groupe Etat islamique et préoccupe au premier chef la Turquie. C’est le tombeau d'un dignitaire ottoman, Suleiman Chah, localisé en Syrie mais sous souveraineté d’Ankara et, à ce titre, placé sous la protection d'une quarantaine de soldats turcs. Le président Recep Tayyip Erdogan a ouvertement menacé les jihadistes de représailles en cas d'attaque de ce lieu.

Pour la première fois, le président turc a expliqué quel pourrait être, selon lui, le prétexte à des frappes ou une intervention sans hésiter «contre la présence de l’Etat islamique»; ce serait selon Recep Tayyip Erdogan, «si et seulement si les jihadistes violaient le statut d’extraterritorialité du mausolée Suleiman Chah», père du fondateur de la dynastie ottomane, une minuscule portion de territoire turc sur les rives de l’Euphrate, au dessus de Raqqa.

Provocation ouverte

Hormis cela, il faudrait au moins une provocation ouverte des islamistes pour imaginer une riposte d’artillerie de la Turquie, en cas, par exemple, de chute de projectiles sur le territoire turc, sinon, et le ministre de la Défense Ismet Yilmaz l’a bien précisé lors de son argumentation de la résolution devant le Parlement: elle n’a pas vocation à être appliquée immédiatement.

Ankara n'a aucune envie de voler au secours des Kurdes

La Turquie veut pouvoir instaurer et assurer la sécurité d’une zone tampon en Syrie du nord, qui permettrait de gérer le flot des réfugiés, de protéger sa frontière et fournir une assistance militaire et logistique aux combattants de l’Armée syrienne libre, un point c’est tout. Or, même ces simples missions, bien éloignées des buts de la coalition, semblent irréalisables en l’état actuel des choses. Et surtout, Ankara n’a aucune envie de voler au secours des Kurdes en ouvrant les hostilités contre le groupe Etat islamique, son ancien allié objectif et qui le reste toujours dans sa lutte contre le pouvoir de Bachar el-Assad.

RFI par Jérôme Bastion publié le 04-10-2014